"Si no me caso con vos, me hago cura", le dijo Jorge Mario Bergoglio a Amalia, cuando ambos tenían 12 años. Eso es lo que ella misma ha contado en la televisión de su país un día después de saber que su novio de infancia se había convertido en Papa.
"Jugábamos al agua, a la rayuela, bailábamos, es algo muy lindo de recordar", asegura Amalia que guarda muy buenos recuerdos del pontífice y su familia.
Dicen de él que es un hombre sencillo, austero, amante del fútbol y del tango. Poco a poco vamos conociendo más datos sobre la personalidad del sucesor de Bedicto XVI, un Papa con un estilo difrente para la Iglesia del Tercer Milenio.
Un día después de ser elegido, Jorge Mario Bergoglio acudió a rezar a la la Basílica de Santa María La Mayor, tal y como había anunciado y a continuación pasó a recoger sus pertenencias a la Casa Internacional del Clero, donde estaba residiendo antes de comenzar el Cónclave. Él mismo pidió la factura y la pagó como un cliente más, "para dar ejemplo".
La anécdota, que contaba el portavoz vaticano Federico Lombardi, define la personalidad del nuevo pontífice, que es descrito como un hombre sencillo y austero por los que le conocen.
El miércoles, su presentación oficial ante el mundo en el balcón de la basílica de San Pedro, también, estuvo marcada por su carácter. Francisco vestía unicamente la sotana blanca, sin las cruz de oro que han llevado otros papas – la sustituyó por otra más sencilla- y la sin estola, que sólo se puso para impartir su primera bendición.
De regreso a la Casa Santa Marta, donde se ha alojado durante el cónclave, prefirió ir en un microbús con el resto de cardenales y dejar aparcado el automóvil del Santo Padre.
Está acostumbrado a viajar en transporte público, de hecho, hasta hace muy poco se le podía ver en el metro.)
Socio del club de fútbol San Lorenzo de Almagro, el Papa Francisco es un hombre de gustos sencillos, amante del tango y lector de Borges, que habla cinco idiomas- español, italiano, alemán, inglés y francés- y que estudiará portugués para su próxima visita a Brasil.
Un pontífice lleno de ganas y energía, a pesar de haber sufrido problemas de salud en su juventud - le extirparon una parte de un pulmón hace cuarenta años-. 'Eso no ha sido nunca un obstáculo ni para su ritmo de trabajo, ni para su vida y su actividad pastoral', ha aclarado Federico Lombardi.
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