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Madrid, 11/03/2013 (EFE).- La secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, ha asegurado hoy sentirse muy apoyada por su partido, y especialmente por su presidente, Mariano Rajoy, y ha defendido la gestión popular del caso Bárcenas porque está convencida de que "está haciendo lo que tiene que hacer".
Cospedal ha sido la protagonista de un desayuno informativo de Nueva Economía Fórum al que han asistido casi mil personas, según los organizadores, y en el que ha sido arropada por Rajoy, seis de sus ministros y los miembros de la cúpula del partido.
Rajoy ha sido el encargado de presentarla y había gran expectación por las referencias que pudiera haber en el acto a la situación que vive el partido por el caso Bárcenas.
El presidente del Gobierno, que ha iniciado su intervención con un recuerdo a las víctimas de los atentados del 11M al cumplirse hoy su noveno aniversario, se ha limitado a ensalzar la labor de Cospedal tanto como presidenta de Castilla-La Mancha como secretaria general del PP.
A su juicio, es "una mujer excepcional" y "un magnífico ejemplo a seguir" porque "ennoblece la vocación de servicio público".
Cospedal ha dedicado gran parte de su intervención inicial a reconocer el delicado momento que atraviesa la política y a instar a una reacción de las instituciones para que los ciudadanos recuperen la confianza en los políticos.
"No podemos consentir que comportamientos reprobables, ilícitos o indignos cercenen la vida democrática y el porvenir de España", ha señalado de forma genérica.
Ha sido en el coloquio posterior cuando el moderador le ha planteado directamente la situación que vive el PP por el caso Bárcenas y si se ha sentido poco respaldada.
Cospedal ha negado esta última cuestión asegurando que ha sido en todo momento "muy apoyada" por su partido, y en particular por Rajoy, ha rechazado que se haya planteado que esta situación le pueda pasar factura y ha considerado que el PP "está haciendo lo que tiene que hacer".
Una actuación que pasa por explicar con toda transparencia cuál es la situación, al tiempo que ha recordado que muchas cuestiones de este asunto están judicializadas.
"Confío mucho en la labor de los tribunales y me alegro de que esos asuntos estén judicializados porque así conoceremos la verdad de todo", ha añadido.
Ha reconocido que el PP atraviesa un momento difícil, pero ha dicho que más lo fue el de los atentados del 11M, y ha señalado que la crisis hace que "las sensibilidades estén a flor de piel" y es lógico que escandalicen más comportamientos "ilícitos e indignos".
En su primera intervención había recordado que la última encuesta del CIS sitúa la corrupción como segundo gran problema para los españoles, después del desempleo, y había dicho que, si existe esa sensación, las instituciones tienen que actuar.
Ha subrayado que el Gobierno ya lo está haciendo con las medidas anunciadas por Rajoy en el debate sobre el estado de la nación, pero ha considerado necesario que actúen todas las demás instituciones "con determinación y sin demagogia".
Para Cospedal, si no se reacciona, "se corre el riesgo de que la democracia representativa naufrague en medio de una tormenta de protestas, indiferencia, demagogia y populismo".
"Hemos entendido el mensaje. Hemos entendido que los españoles quieren partidos que les escuchen y que les representen, y no quieren estructuras o aparatos organizados para conquistar el poder", ha asegurado.
Ha recordado que el PP nació con la democracia y, por tanto, no es "rehén de ideologías trasnochadas o discursos caducos" y, en consecuencia, tiene la capacidad de mirar más allá de sus intereses electorales y propiciar el bienestar de los españoles.
Cospedal ha abogado por "políticos de verdad" centrados en salir de la crisis, como ha dicho que hace Rajoy, y ha avisado de que para lograr ese objetivo no valen "ni los tecnócratas ni los burócratas, aunque ayuden, y, desde luego, no valen los iluminados ni los oportunistas".
La presidenta de Castilla-La Mancha ha repasado su gestión al frente de esta comunidad para asegurar que "los sinsabores y sacrificios no han sido en vano", ya que cree que se ha recuperado la credibilidad ante la UE, ante los inversores y las empresas y "sin poner en peligro los servicios públicos sociales".
Respecto a la situación en Cataluña, se ha mostrado preocupada por "la utilización por algunos de los sentimientos para hacer política o para justificar su propia existencia" y ha dicho que es "mala para España" la "división interna" entre PSOE y PSC.
Al término del acto, un grupo de afectados por las preferentes bancarias y otro de incursos en procedimientos de desahucio se han concentrado a las puertas del hotel en el que se ha celebrado el evento para expresar sus protestas.
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