Solo ha pasado una semana desde la inauguración oficial de su pontificado y el Papa Francisco continúa dando muestras de austeridad.
En esta ocasión, Bergoglio ha sorprendido a todos al anunciar que permanecerá en la Casa Santa Marta, donde se aloja desde el cónclave, y no se mudará, al menos por ahora, al lujoso apartamento pontificio. Así lo ha confirmado el portavoz de la Santa Sede, el padre Federico Lombardi.
Ha sido el propio Pontífice el que después de la misa del martes informó de su decisión, "con palabras muy sencillas dio a entender que su intención –por lo menos en esta fase- es la de permanecer en la Domus Sanctae Marthae", explicó Lombardi.
Según informa la Santa Sede, el Papa Francisco cambió hace unos días la habitación en la que se alojaba durante el cónclave por otra más amplia, el apartamento 201 destinado a los huéspedes especiales. En este lugar el Santo Padre tiene la posibilidad de recibir visitas más fácilmente dado que cuenta con mayor espacio.
La Casa Santa Marta, está situada a pocos metros de la basílica de San Pedro y en ella vive habitualmente el personal que presta servicio en el Vaticano. Es también la residencia donde se alojan los cardenales y obispos que se encuentran de paso.
El portavoz vaticano ha precisado que para las audiencias importantes y encuentros con grupos, el Papa utiliza desde hace días las instalaciones del Palacio Apostólico, donde se encuentran la Sala Clementina, la Biblioteca privada y otros ambientes aptos para su actividad oficial.
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